LA CHINCHETA. ¿Y los Sindicatos?

Estamos saliendo adelante a base de sangre, sudor y lágrimas, por eso, el hecho de que muchos liberados sindicales no se hayan incorporado a su puesto de trabajo (como han hecho deportistas de élite, escoltas, médicos jubilados y hasta políticos) dice mucho, o muy poco de ellos. Es verdad que la caridad, y la solidaridad bien entendidas empiezan por uno mismo. Pueden cogerla conmigo y revolcarse en su pensamiento creativo si quieren, pero es lo que piensa la gente.

Este Día del Trabajo, no será recordado como una celebración (tampoco es que lo fuera mucho...), pues miles de trabajadores han “muerto” como consecuencia del coronavirus, un huracán que, ha derrumbado nuestro modelo de vida, nuestra estabilidad laboral, así como el futuro de miles de trabajadores. Los cálculos más optimistas hablan de 6 millones de parados a final de mes.

Con este panorama, percibo bastante tibieza en los Sindicatos, agazapados a la espera de no sé qué. No sé si están amedrentados por el escenario, pero no están, no se les oye. Mientras que diferentes Gobiernos Autonómicos han impulsado campañas para contratar a sanitarios y combatir a la pandemia, hay un 70 % de liberados sindicales que no están trabajando en atender a pacientes en el campo de batalla. Y son los primeros que deberían estar para dar ejemplo, porque seguro que son capaces de hacer dos cosas a la vez: atender a los compañeros representados y a los enfermos.

Solo 3 de cada 10 representantes sindicales a tiempo completo se han reincorporado a su puesto. Se les ve por los centros de trabajo con los currantes, me consta, pero...no es suficiente en una crisis de esta magnitud. Cuando hay que estar, se está. ¿Dónde están los sindicatos guerrilleros y reivindicativos, que ponían este país y a sus gobiernos patas arriba? Lo siento, pero dan la sensación de no estar, ni se les espera, como a los liberados...