LA CHINCHETA. Los paraísos también se pagan...
La Gomera ha iniciado una rebelión por la reducción de las bonificaciones a las tasas portuarias de residentes y no residentes. Puede parecer una perreta, pero no para una isla, cuya conectividad con el resto del mundo depende casi exclusivamente de la conexión marítima. Por ahí entra todo: carga, pasaje, influencias, conspiraciones y asuntos varios innombrables.
Con los Presupuestos Generales del Estado de 2021, se suprimen
las bonificaciones a los no residentes y se reducen a los no residentes. Y
siempre le ponen la pata encima a una isla no capitalina, las mal llamadas
islas menores. Se va a encarecer el precio de los billetes. Para un
trayecto tan frecuentado por residentes, turistas, y absolutamente necesario
para vehículos de mercancías, como el que une el puerto de Los Cristianos con La Villa, supone
un aumento de 6 euros.
Puede parecer un puñado de euros, con los que usted se
echaría unas cervezas, pero sumados, en un año, a La Gomera le hacen un destrozo absoluto. Y
los Gomeros, han decidido dar la guerra con esto. El Cabildo, empresarios, las
navieras y la Cámara de Comercio lo tienen claro, porque son decisiones que machacan
nuestros bolsillos, y peor aún al de los turistas, que ahora no vienen, pero
que volverán, y estamos hablando de casi 400.000 visitantes.
Hagan cuenta, no es un puñado de euros, estamos hablando de
unos cuantos millones. En La Gomera la vida nunca
fue fácil. La isla ya sufre las consecuencias de la doble insularidad, cesta de
la compra más cara, pymes, autónomos y empresas, que tienen que pelear el doble,
estudiantes que tienen que entrar y salir pagando más...que más les voy a
contar. Es la realidad de las islas no capitalinas.
Es verdad que la isla es un paraíso. Todos dicen: “Ños,
que guapo es ir a la Gomera, es increíble...me bañé en Gran Rey, y me mandé un
plato de potaje de berros del carajo...” Pues señores del Estado: los paraísos,
el baño, el potaje, el monte del Cedro, la Laurisilva y el Patrimonio de la
Humanidad, también se pagan...y si no pregunten a Ángela Merkel o a los medios de comunicación alemanes,
promocionando hasta las orejas a La Gomera, incluso en tiempos de Pandemia.
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